GKS 2232 4º: Guaman Poma, Nueva corónica y buen gobierno (1615)

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La prisión y ejecución de Atagualpa Ynga, pág. 390

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CONQVISTA

Cómo le prendieron y estado preso Atagualpa Ynga; estando preso, le rrobaron toda su hazienda don Francissco [sic] Pizarro y don Diego de Almagro y todo los demás soldados y españoles.

Y lo tomaron toda la rriquesa del templo del sol y de Curi Cancha y de Uana Cauri muchos millones de oro y plata que no se puede contar, porque sólo Curi Cancha toda las paredes y la qubirtura y suelo y las uentanas quajado de oro. Dizen que la persona que entra dentro con el rrayo de oro parese defunto en el color del oro. Y del Ynga Atagualpa y de todo sus capitanes y de señores prencipales deste rreyno y las dichas andas de oro y plata que pesaua más de ueynte mil marcos de oro fino el tablón de las dichas andas y ueynte mil marcos de plata fina, un millón y trecientos y ueynte y seys mil escudos de oro finícimo.

Acimismo les quitó sus serbicios hasta quitalle su muger lexítima, la coya [reina].

Y cómo se uido tan mal tratamiento y daño y rrobo tubo muy gran pena y tristeza en su corazón y lloró y no comió. Como uido llorar a la señora coya, lloró y de su parte ubo grandes llantos en la ciudad. De los yndios cantaua desta suerte:

Aray araui! Aray araui!Sapra aucacho, Coya atiuanchic, llazauanchic?Ma, Coya. Suclla uanoson.Amatac acuyraque cacachuncho!Paracinam uequi payllamanta urman.Cam, Coya, hinataccha.

[¡Aray arauil ¡Aray araui! ¿Podrá este enemigo malvado, reina, derrotarnos, darnos pesadumbre? ¡No, reina! Vamos a morir todas a una. ¡Que no nos alcance la desgracia! Las lágrimas caen como lluvia por sí solas. ¿Podrías tú, reina, ser tal?]

De cómo estando preso conuersaua Atagualpa Ynga con don Francisco Pizarro y don Diego de Almagro y con los demás españoles y jugaua con ellos en el juego de axedrés que ellos les llaman taptana 1. Y era muy pacible príncipe y ací se contentaua con los cristianos. Y daua su hazienda y no sauía con qué contentalles y rregalalles.

De cómo estando preso Atagualpa Ynga, todo sus bazallos y yndios y capitanes y señores grandes de su rreyno le desanpararon y no le serbieron.

De cómo procuró de rrescatar su uida Atagualpa Ynga con todo sus capitanes y dio a don Francisco Pizarro y a don Diego de Almagro y a todos los soldados mucho oro, que una casa señaló. Con su propia espada, le medió

/ Aray arawi! Aray arawi! Saqra awqachu, quya atiwanchik, llasawanchik? Ma, quya! Suqlla wañusun. Amataq aquyraki kachachunchu! Parasinam wiqi payllamanta urman. Qan, quya, hinataqcha! / quya / taptana /

1 En Holm, 1958 [Bib]: pp. 91-104, se encontrará una discusión del juego de taptana. Guaman Poma es la única fuente que se refiere al juego en el contexto del encarcelamiento de Atahualpa. Véase el tablero dibujado por Guaman Poma en la página 389.